Decía que era proxeneta para tener sexo gratis “Que maldita sorra

El sujeto buscaba a las víctimas desde la ciudad de Oruro (Bolivia), provincia de Cercado, e interactuaba con ellas por Facebook.

Un hombre de 38 años residente de la ciudad de Oruro, provincia de Cercado (Bolivia), se hacía pasar por proxeneta e intercambiaba mensajes en Facebook con mujeres para ofrecerles un supuesto trabajo, pero en verdad solo buscaba tener relaciones íntimas con ellas, informa El Deber.

El mecanismo para engañar era sencillo: “¿Te interesa un trabajo?, debes ser dama de compañía solo para ejecutivos y cobrar 200 bolivianos (29 dólares) la hora”, solía decir el delincuente, según citó el medio local ya mencionado. La excusa para conseguir los encuentros carnales consistía en argumentar que antes de trabajar para él, debía conocerlas.

Sin embargo, este miércoles fue atrapado en la avenida 6 de Agosto, casi en la intersección de la calle José Ignacio León, por la División de Trata y Tráfico de Personas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen. En efecto, las autoridades fueron alertadas sobre este mecanismo fraudulento por una de sus víctimas.

Al respecto, el teniente Brayan González afirmó que “se dio con él mediante un patrullaje virtual”, y añadió: “Ya teníamos información de que este tipo de personas trataban de captar a sus víctimas de esta manera”. Así las cosas, la detención se hizo bajo el cargo de trata de personas, situación que podría conducir a la cárcel al malhechor.

Dos cuentas en Facebook
Foto ilustrativa’Madame’ sin lujo: la nueva vida de la proxeneta colombiana más famosa en una cárcel ruinosa (FOTOS)
Según publicó el diario de ese país sudamericano, el maleante contaba con dos perfiles en Facebook, y uno de ellos era falso. Asimismo, el jefe de la división policial confirmó que la mentira consistía en ofrecer un aparente empleo como dama de compañía utilizando aquella herramienta virtual.

Sin embargo, todavía resta que avancen las respectivas investigaciones —por eso no se devela el nombre del acusado—, que incluyen la revisión de equipos electrónicos. Además, las autoridades judiciales también deberán determinar si la red social tiene algún tipo de responsabilidad en la fechoría.

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